Dermatitis atópica y vida en familia

Y es que el 20% de los niños en España presentan dermatitis atópica. Un 60 % de los casos son diagnosticados antes del año de edad, y en torno al 85 % aparecen antes de los 5 años de edad.

Durante los primeros años de vida del niño, el 57% de las mamás prefieren bañar al niño a diario mientras que otras lo realizan en días alternos y cuando el niño presenta la piel atópica este porcentaje disminuye hasta el 47%. Lo que sí es unánime entre casi las 3.000 familias encuestadas es que se prefiere el baño a la ducha cuando los niños son pequeños (en torno al 80%).

En torno al 55% de mamás escogen geles específicos tipo ”syndet” para bañar a sus hijos y este uso aumenta considerable cuando la piel es atópica (76% de las familias lo emplean) pues los ”syndets” respetan y cuidan de su delicada piel.

El 75% de mamás con bebés con la piel normal sin dermatitis atópica utiliza cremas emolientes para cuidar la piel del bebé. Una buena hidratación diaria de la piel desde el nacimiento puede llegar a reducir hasta un 50% la probabilidad de aparición de dermatitis atópica. Las cremas emolientes ayudan a mantener la barrera epidérmica, hidratando y protegiendo la piel.

9 de cada 10 familias con niños con piel atópica hidrata su piel con emolientes de 1 a 2 veces al día. Más del 90% de las familias con niños con dermatitis atópica lo practica y cuida la piel atópica a diario mediante cremas emolientes.

El 50% de las familias ya utiliza una crema específica para la hidratación y el cuidado del rostro pero son las familias con un niño con piel atópica las que hacen más hincapié en la utilización de este tipo de cremas (hasta un 70% las utiliza). Y es que la piel en esta zona es más fina y delicada, está expuesta a factores externos agresivos como el viento y el frío y requiere de una crema específica que la proteja.

De manera general, el 80% de las familias españolas no suele regular la temperatura de la habitación de su hijo ni tampoco suele emplear humidificadores para evitar ambientes muy secos; tan solo 1 de cada 4 familias sí los emplea haya o no un miembro de la familia con dermatitis atópica. Sin embargo, si existen diferencias a la hora eliminar elementos que puedan generar acumulación de polvo en la habitación como peluches, alfombras... en el caso de los niños con piel atópica, el 65% de las familias los elimina de la habitación mientras que si el niño no presenta dermatitis atópica, no hay causa justificada para quitarlos y tan sólo el 45% de los casos los quitan como prevención.

En torno al 80% de las familias utiliza ropa de algodón para vestir a sus hijos tanto si presenta piel atópica como no aunque todavía hay mamás que optan por otros tejidos como la lana (0,2%), sintético (1%) y mezcla (16%). Entre el 75-80% de las mamás quitan las etiquetas de la ropa de los niños para evitar el roce con la piel, sobre todo en aquellos casos que el bebé tiene dermatitis atópica. Sea cual sea el tipo de ropa, el 60% de las familias suele emplear un detergente específico para la ropa del bebé pero el porcentaje se incrementa hasta un 73% cuando éste presenta dermatitis atópica y además separan más la ropa del resto de la familia ya que son conscientes de los cuidados específicos de este colectivo. Sin embargo, la utilización de suavizante depende de cada familia, ya que 50% sí lo utilizan y 50% no, independientemente si hay algún atópico o no entre la familia.

Tal y como recomiendan los expertos y sociedades científicas, un porcentaje elevado de familias con bebés con piel atópica no realizan cambios en la alimentación (73%) a no ser que se haya diagnosticado alergia específica a algún alimento en concreto (leche, huevo, frutos secos...) en cuyo caso será excluido de la dieta del bebé.

Un 66% de familias comenta haber recibido información acerca de la dermatitis atópica. El colectivo médico juega un papel muy importante a la hora de asesorar a las familias con bebés con piel atópica en el control de la enfermedad de su hijo.

La opinión de los padres acerca del tratamiento para el control de los brotes con corticoides es muy similar entre las familias que tienen un bebé con dermatitis atópica y que por tanto conocen este tipo de cremas farmacológicas pues en algún caso han llegado a utilizarlas. Un 45% solo los usaría si son necesarios y un 27% prefiere evitarlos y tan solo un 9% los considera una buena opción.

El primer impacto en una familia con un bebé con dermatitis atópica es el emocional. Más de 1.000 familias (60% de las familias con bebés con dermatitis atópica encuestados) han visto afectada su calidad de vida a nivel emocional (preocupación, intranquilidad...). En segundo lugar, se encuentra el impacto económico, afectando a un 53% de las familias, debido a la utilización de productos específicos con un coste más elevado al resto de productos para el cuidado de la piel. En tercer lugar (13% familias) la aparición de cansancio y estrés, que suele afectar también al día a día en estas familias.